F. G. HAGHENBECK
Era su Madrina: le permitió volver a la vida tras el fatídico accidente de tranvía. A cambio, le exigió que cada año le ofrendara un banquete
nuevo. Los altares que Frida Kahlo preparaba con minuciosidad cada Día de Muertos, y que registraba puntualmente en su librito de
recetas, eran prueba de su devoción y compromiso. Pero su Madrina nunca dejó de atormentarla, de arrancarle la vida pedazo a pedazo, de
recordarle que estaba en la tierra viviendo días prestados. El amor, la pasión, la vida artística y la soledad íntima de la pintora siempre
estuvieron marcados por la muerte. En esta vigorosa novela, F.G. Haghenbeck relata la vida pública e íntima de Frida desde su infancia en
Coyoacán hasta el día en que escribió en su diario: Espero que la marcha sea feliz y esta vez espero no volver. Publicada en veintiún
países y diecisiete idiomas; ganadora del premio Gourmand 2013, en Francia, y finalista en los International Latino Book Awards 2013.