ANA HUANG
Acomedido, melancólico y arrogante, Rhys Larsen es un guardaespaldas que solo tiene dos reglas: proteger a sus clientes a toda costa y no involucrarse emocionalmente.
Y nunca había sentido la tentación de romperlas, hasta que ella llegó.
Bridget von Ascheberg, una princesa obstinada como él, esconde un fuego que convertirá sus reglas en cenizas. Ella no es lo que esperaba, pero es todo lo que necesitaba.
Poco a poco, ella derribará sus muros hasta obligarlo a enfrentarse a una verdad que no puede seguir negando: juró protegerla, pero lo único que desea es corromperla. Porque es suya.
Su princesa.
Su fruto prohibido.
Su fantasía más depravada.
De ascendencia real, decidida y atada con las cadenas del deber, la princesa Bridget sueña con tener libertad para vivir y amar como ella decida.
Sin embargo, cuando su hermano abdica se enfrenta, sin haberlo esperado, a la posibilidad de vivir un matrimonio sin amor, pero políticamente conveniente, y a tener que sentarse en un trono que nunca deseó.
Mientras navega sorteando las complejidades y traiciones de su nuevo papel, también debe aprender a esconder el deseo que siente por un hombre al que no puede amar.