Con ayuda de su abuela y un diccionario, Raúl intento convencer a su mamá para que lo dejara tener como mascota a un perro callejero. La clave era usar palabras rimbombantes.
Artículos relacionados
Otros libros del autor
Vista previa: UN PERRO CALLEJERO
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información