EPOCA
Un adios es cortar de tajo con algo que se tenía; es aceptar de un momento a otro el cambio, es adaptarse y tambén renovarse. Cualquier pérdida altera el mundo como lo conocemos y sacude nuestro entorno. Pero, cuando nos aferramos a la situación, se crea un vínculo que a la larga se vuelve desgastante, porque toda pérdida aporta una carga de dolor.