APARISI ANGELA
No basta que el jurista sea un conocedor del derecho para que su servicio sea útil, es necesario que practique el bien. Está llamado a vivir la virtud de la justicia, que consiste en "el hábito de dar a cada quien lo suyo". No basta con que busque el bien, necesariamente debe dar en el blanco, debe actuar bien, saber discernir lo bueno de lo malo, debe formarse una conciencia profesional. Por ello la importancia de esta obra que se adentra en los valores que deben orientar el actuar del hombre de leyes. ética y deontología para juristas es una excelente guía para la enseñanza de la deontología jurídica, por la forma clara, profunda e inteligente en que aborda los temas fundamentales de la ética: persona, trabajo, obligatoriedad de las normas deontológicas, conciencia; y otros temas específicos de la ética profesional como son: el secreto profesional, independencia, libertad profesional, diligencia, desinterés, competencia y publicidad, entre otros. Estos aspectos son fundamentales para la formación del abogado y para el ejercicio profesional, abarcan la actividad del jurista en todos sus ámbitos. Se trata, por consiguiente, de una herramienta útil para la enseñanza y el ejercicio profesional.