PALOU, FRANCISCO
El mallorquín Francisco Palou llegó a la Nueva España en 1750, destinado como misionero al colegio de San Fernando de la ciudad de México. Treinta v nueve años después v sin haber vuelto a su patria-- fallecería en Querétaro, a donde había ido a buscar remedio para su salud. Había nacido en la ciudad de Palma el 22 de enero de 1723. Muy joven, el 11 de noviembre de 1740, profesó en la Orden de San Francisco. Seguida-mente hizo los tres cursos de filosofía en el convento de San Francisco de Palma, donde tuvo como profesor a fray Junípero Serra, quien enseñaba también en la famosa Universidad Luliana de la misma ciudad, al paso que estudiantes seglares de hecho eran mayoría asistían a las clases dadas en el convento. De 1743 a 1746 tomó Palou los cursos de teología, y en 1746 fue ordenado sacerdote. Durante los tres años siguientes se preparó para el profesorado y en febrero de 1749, aprobados los necesarios exámenes, fue declarado "lector" de filosofía, que debía comenzar a enseñar en el curso de 1750.Pero su carrera de profesor no pasó de allí. Palou quiso más bien seguir a su maestro a las misiones de América. Seguiría desde entonces a Serra en "casi todas sus peregrinaciones, habiéndole merecido escribe el propio Palou en la dedicatoria de la Vida de Serra desde el año de 1740, en que me tomó por uno de sus discípulos, hasta el de 1784, que nos separó la muerte, un especialísimo cariño que siempre nos profesamos, más que si fuéramos hermanos carnales". Palou cuenta asimismo en la obra citada cómo despertó en ambos la vocación misionera: curiosamente fue leyendo crónicas como las que estamos estudiando en este coloquio.